El informe de un extraterrestre.
Ver las cosas desde otro punto de vista nos confronta con la reflexión.
El pasado 26 de julio debe ser un día para recordarse, un día referencial. David Grusch, un exfuncionario de inteligencia de la Fuerza Aérea, declaró bajo juramento ante el Congreso de los Estados Unidos de Norteamérica: "Estados Unidos está ocultando por décadas (quizá desde 1930) un programa de larga data que recupera y realiza ingeniería inversa de objetos voladores no identificados", y aportó evidencias.
La nota trasciende por quién la dijo, cómo la dijo, dónde la dijo y a quién la dijo. Las declaraciones del mayor retirado le dieron la vuelta al mundo, naturalmente. El Pentágono rechaza dichas declaraciones. Como suele suceder.
El tema de la vida extraterrestre, a mí, Alejandro Ariza Zárate, no me es ajeno. Yo ya tuve una experiencia de abducción y fue una vivencia tan extraordinaria que, naturalmente, la mantengo privada en el detalle. Creo que esta es la primera vez que escribo una referencia al hecho, y también recuerdo que durante el encierro de la pandemia, lo llegué a platicar por primera vez con detalle a un grupo muy reducido de seguidores que decidieron entrar a mis "Tertulias con Ariza", reuniones por Zoom para no enloquecer mientras el encierro. En fin, quizá algún día haga un evento privado para disertar al respeto, pero mi mensaje central de hoy para ti es inspirado en el contexto de la gran noticia del pasado 26 de julio, dado que una experiencia personal, como la mía, puede ser percibida con total subjetividad por tratarse tan solo de un ciudadano con cierta influencia social, pero cuando bajo juramento, frente al Congreso de los EE.UU. declara un exfuncionario de inteligencia de las Fuerzas Armadas, adquiere mucha, mucha mayor relevancia.
Este marco de la historia reciente, me hizo recordar lo que en algunas conferencias llegué a comentar, a manera de broma, acerca de "El informe de un extraterrestre", sin tan solo pudiera pasar a ver algunas escenas de las que se suceden en la Tierra y reportara solo lo que vio en ese breve momento. Bromeo con mi público cuando, explicando algún tema de salud, yo creo que el extraterrestre reportaría algo parecido a esto:
«Pasé inadvertido a ver varios lugares donde los humanos se reúnen para ingerir alimentos, ellos les llaman "restaurantes". Hay humanos muy grandes, los humanos de mayor dimensión, ellos mismos les llaman "gordos", también alcancé a escuchar "obesos", y noté que todos beben constantemente una lata, parece de metal, que dice: "Diet-Coke". Seguramente es lo que los hace tan voluminosos, porque vi el fenómeno en todos los restaurantes. También hay humanos más pequeños, delgados, muy delgados, ellos toman otra lata, parecida, pero de color rojo, esa dice: "Coca-Cola", y otros, los menos, en un recipiente de vidrio, toman agua. Seguramente la lata roja los mantiene delgados».
Yo creo que eso es lo que reportaría un extraterrestre, porque no conoce el contexto, el deseo y el paso del tiempo aquí. Pero lo que sería irrefutable es "lo que vio", la gente obesa toma "Coca de dieta", y los delgados toman más "Coca normal". ¡Qué interesante reporte sería este del extraterrestre! Porque quizá, para los nuevos avances de la ciencia, quizá tuviera toda la razón.
En fin, el hecho es que bromeo con mi público con esto cuando toco temas de salud tan solo para ponerlos a pensar, porque, ya te dije, quizá el extraterrestre tendría razón..., por eso, entre broma y broma, la verdad se asoma.
Sin embargo, algo que desde hace mucho tiempo quería compartir contigo es un texto que se me apareció en mi "timeline" de alguna red social, y lo guardé. No lo firmaba ningún autor, me hubiera gustado reconocerlo. El texto habla precisamente de "El informe de un extraterrestre". Muy en la línea de reflexión de mi "broma" con la Coca-Cola y el tamaño de las personas que la consumen. Dado el momento histórico, creo que llegó el momento de compartir ese texto. Aquí está para tu reflexión:
–¿Qué averiguaste sobre los seres más inteligentes de la Tierra?
–He aquí mi informe: Tiran sus deshechos a los ríos y los lagos, y luego tratan de purificarlos nuevamente para tener agua cristalina como la que ya tenían.
Siembran para alimentar a sus hermanos menores (los animales), los cuales, necesitan muchísimos kilos de vegetales, para luego comerlos, pero si todos comieran los frutos de su planeta, tendrían alimentos de sobra para todos.
Incendian sus bosques, los talan utilizando su madera y no plantan sus semillas para reponerlos, o los destruyen, cuando, si ellos desaparecieran, no tendrían más oxígeno para respirar.
Envían a sus hijos fuertes y sanos al campo de batalla, para luego inventar aparatos ortopédicos para que puedan movilizarse.
Ensucian el aire que necesitan para respirar.
Usan fertilizantes que han prohibido ellos mismos (luego de constatar su peligroso veneno) para sus plantas comestibles. Denominan fumigar, a contaminar el aire y producir la muerte de las aves que transportan las semillas de un lado a otro, y además, son quienes se alimentan de aquellos insectos que perjudican su siembra. Usan conservantes químicos en sus alimentos que perjudican la salud. Con todo esto, se enferman y luego crean medicamentos para curarse.
Utilizan la energía atómica, con la que inventan sofisticados aparatos para matarse entre ellos, evento que, a la vez, les deja desechos nucleares, los que entierran en lugares que se convierten en zonas cancerígenas y productoras de deformaciones en sus cuerpos físicos, cuando están en estado fetal.
Interfieren el recorrido de los ríos poniendo centrales costosas para generar electricidad, cuando el Sol sale en todo el planeta y da su energía sin costo y sin consecuencias.
Pierden 6.000 especies vegetales por día.
Las naciones del Norte prueban bombas nucleares en el Polo Sur de su planeta, como si no fuera parte del lugar que habitan todos, haciendo como que ignoran que los iones negativos que quedan en el aire, son atraídos por el Polo Norte que es el Positivo. Destruyen, con estas explosiones, la capa de ozono que cubre el planeta y que les da protección.
Inventan bacterias que minan la vida con la excusa de guerras, para atacarse unos a otros, cuando todos son una sola humanidad; y lo que le pasa a cada uno afecta a todos.
Arrojan semillas al mar en un lado y en otro los niños se mueren de hambre, porque no tienen con qué alimentarlos.
Les venden drogas a sus jóvenes para luego tratar de curarlos.
Los educan desde niños con películas y dibujos llenos de violencia y luego los marginan por violentos.
Escuchan vibraciones fuertes que sobrepasan los decibeles de tolerancia de sus órganos auditivos, las denominan "música", y luego inventan audífonos para los sordos.
Se alimentan con desechos de cadáveres de animales, llenos de bacterias y grasas y luego inventan aparatos y dietas, para quitarse los residuos adiposos y las enfermedades que, en consecuencia, se produce en sus cuerpos físicos.
Cazan a los animales con los que deben compartir el hábitat de evolución minando las especies, por el solo hecho de poner la cabeza del cadáver de adorno en las casas en que viven.
Usan la energía del dinero para subordinarse los unos a los otros, creyéndose importantes los que la acumulan, como si se la llevaran al retirarse del planeta. Acumulan cosas materiales que no usan, haciendo incómodo y sucio el lugar en el que viven.
Utilizan la sangre del planeta, a la que denominan petróleo, para movilizar sus vehículos, los que a su vez y como consecuencia, contaminan el aire que respiran, cuando ya tienen los conocimientos para hacer vehículos que funcionan con agua, los cuales generarían oxígeno que a su vez, lo purificarían.
Ensucian los océanos. En general, agreden la vida en cualquier forma que esta se manifieste.
Guardan los cadáveres de los que abandonaron sus cuerpos, en lugares que llaman cementerios.
Y luego hay gente que se pregunta por qué no se aparecen los extraterrestres más abiertamente en la Tierra. Muchas veces se nos ha dicho que son seres de una inteligencia muy superior. Ahí está la respuesta del porqué no vienen a quedarse. Pasan, ven, y de inmediato se regresan a sus lugares a velocidades mayores que la velocidad de la luz.
–Alejandro Ariza Z.
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“Solo somos una raza de primates en un planeta menor de una estrella ordinaria, pero podemos entender el universo”.
–Stephen Hawking
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Impresionante columna Dr.
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