La intervención divina.
Acerca de una realidad difícil de entender, la mano de Dios en nuestras vidas. Acerca de lo que necesitamos hacer para permitir que Él obre usándonos y cómo suele manifestarse. Una poderosa oración.
Sensible lectora, lector:
¡Hola! Otra semana más juntos y ahora en un nuevo formato, un poco más concreto. Espero lo disfrutes más así.
En esta publicación, te comparto:
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✍🏻 Editorial: “La intervención divina”.
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✍🏻 Editorial: “La intervención divina”.
Por alguna extraña razón sentí el deseo de escribirte acerca de un fenómeno que, podríamos decir, "me consta": La intervención divina en mi vida. Estuve a punto de escribir "...en nuestras vidas", pero para respetar las creencias de cada quien, quizá sea más sutil y prudente hablar en primera persona del singular acerca de estos temas en un primer párrafo de una publicación.
Pasan los años, volteo un poco hacia atrás, siendo esta la única forma de empezar a entender por qué vivimos lo que vivimos, y alcanzo a ver, perfectamente bien, con escalofriante claridad, la mano de Dios en el armado de mi experiencia. Si crees en Dios, muy posiblemente te va a servir mucho mi publicación de esta vez. Si no, puedes llamarle de otra manera a Dios: campo cuántico, universo, energía, orden universal, etc. Como quieras, aplica el mismo fenómeno del que te quiero hablar hoy: Existe algo superior a nuestro entendimiento que pone orden en el devenir de nuestras experiencias para nuestro propio bien y el de todos en general.
Hace un momento venía en el auto y comentaba con gran admiración y profunda gratitud con mi acompañante de trayecto cómo se han sucedido las cosas últimamente en mi vida y cómo, lo que parecen cambios insospechados, eran parte de un plan perfecto, uno divino, para que los siguientes eventos encajaran perfectamente bien y pudiéramos atestiguar un orden sucedido para nuestro bien, nuestra seguridad y nuestra paz. Solo que cuando observas con atención tanta perfección acerca de lo sucedido, el descubrir que como se dieron las cosas fue la mejor manera para nuestro bien, es más que sorprendente y fuente de gratitud permanente. Observar el orden así es sobrecogedor.
Confía en Dios. Él tiene un plan perfecto para ti que se desarrolla momento a momento. He observado, luego de poner atención por años y años, que la intervención divina tiene, esencialmente, las siguientes manifestaciones en la vida de una persona: