Pan de la vergüenza.

Conversando con un paciente, me hizo recordar “el pan de la vergüenza”, así hoy te quiero comentar de él. Es un concepto kabalístico que…

Conversando con un paciente, me hizo recordar “el pan de la vergüenza”, así hoy te quiero comentar de él. Es un concepto kabalístico que significa la permanente insatisfacción humana cuando se recibe algo que no se ha merecido o que no se ha luchado por conseguir.

¡Permanente insatisfacción! ¡Qué tremendo que aún recibiendo algo, en el fondo del corazón, sea imposible gozarlo a plenitud, nunca! El gozo radica exclusivamente en el merecimiento, no por lo que se recibe.

Si eres padre, líder, si eres a quien le toca dar, no engendres desgracia en la vida de alguien dándole lo que no merece. Sembrarás así insatisfacción de por vida en esa alma. Sé justo. Da cuando exista merecimiento. Y recuerda que la peor injusticia es tratar igual a los desiguales.

Si eres a quien le toca recibir, ¡cerciórate de que exista merecimiento! ¡Y eso tú lo sabes! De lo contrario, si recibes sabiendo perfectamente que no mereces, amargarás tu alma de por vida, aún con lo recibido, o mejor dicho, por recibirlo. Podrás actuar todo el tiempo que creas, fingiendo felicidad o incluso indiferencia, pero tú mejor que nadie sabrá, por siempre, que nunca mereciste. El fingimiento de la felicidad, el sostenimiento de la indiferencia, tarde o temprano se convertirán en abrumadora amargura, desolación e irremediable vacío. La farza incapacita al ser. Evítatela. Esfuérzate. Merece. Ahí hay Luz, sólo así hay dicha.

– Dr. Alejandro Ariza.