Profetiza
El poder de tus palabras es más grande del que tu imaginación pueda concebir. Úsalo.
Sensible lectora, lector:
¡Este mes de septiembre que hoy inicia, es el mejor septiembre que hemos vivido en toda nuestra vida hasta el momento! Inicia un mes de prosperidad, salud, amistad y bienaventuranzas como ningún otro. Este mes de septiembre será marcado por el inicio de milagros para miles y miles de personas. Muchos de ellos, en este mismo mes, serán consumados para su disfrute. Para alabanza de Dios.
¡Qué maravilla tener la oportunidad de atestiguarlo juntos!
¿Qué sientes al leer lo anterior? De eso hablaremos hoy.
En esta publicación, te comparto:
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✍🏻 Editorial: “Profetiza”.
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✍🏻 Editorial: “Profetiza”.
Profetizar, según el diccionario, significa: Anunciar o predecir las cosas distantes o futuras, en virtud del don de profecía. Y el don de la profecía, a su vez, significa: Don sobrenatural que consiste en conocer por inspiración divina las cosas distantes o futuras. Parto de la premisa de que ¡todos tenemos ese don! Pero pocos lo creen y, por lo mismo, mucho menos lo usan.
“El que es bueno, de la bondad que atesora en su corazón, produce el bien; pero el que es malo, de su maldad produce el mal, porque de lo que abunda en el corazón, habla la boca”. – Lucas 6:45
En varias de mis conferencias he explicado ampliamente lo que son las palabras:
Las palabras son la manifestación acústica del pensamiento.
–Alejandro Ariza Z.
De ahí, que desde nuestro sentir, desde nuestro corazón, se insufle nuestro pensamiento y este se empiece a materializar, incipientemente, en forma de sonidos con significado: palabras. Y de la palabra surgirá la orden para actuar. Y del actuar se suceden resultados tangibles, observables, realidad física.
En un breve párrafo sintetizo toda una conferencia de más de dos horas, “La fuerza del pensamiento”. Bellísima consecuencia de “El poder del sentimiento”.
Lo que afirmes, tiende a suceder. Lo que afirmes con fe, es lo que puede ser una auténtica profecía para tu vida. Declarar con una sensación de una inminente aparición, engendra una emoción difícil de describir, pero que claramente se experimenta.
Todos hemos vivido la emoción de la expectativa de que esté a punto de suceder algo maravilloso para nuestro bien y el de nuestros seres queridos. Esta poderosa emoción y alegría anticipada todos la hemos experimentado casi como una bendición. ¡Recuerda un evento así! Recuérdalo ahora. Conéctate con ese sentimiento.
Pues… ¡Algo así puede volver a suceder!
¿De qué depende? De muchos factores, pero uno que sin duda es el efecto bujía y a partir del cual se suceden todos los demás, es tu profecía, tu decreto, el uso emocional y positivo que le des al don de poder articular palabras. ¡Tienes el don! ¡Todos lo tenemos! El reto: ¡Usarlo!
Te recomiendo que digas en voz alta y con firme determinación:
Dios, nuestro Señor, restaurará todo lo perdido y lo hará con magnificencia ante nuestros ojos, y este mes de septiembre será el inicio de otro milagro
Dios, nuestro Señor, unge nuestras cabezas para bendecirnos con Su Espíritu Santo y darnos la paz que buscamos, así como la creatividad para actuar en lo que debamos hacer
La salud y el bienestar de mi cuerpo son cada día mejor, y la intercesión de Dios para que yo atestigüe sanidad en todo mi cuerpo ¡es evidente cada día!
¡Los retos económicos se están resolviendo ya! Contra toda mi lógica, ¡hay solución! Porque por más grandes que sean los problemas de dinero, Dios es más grande que cualquier problema. Él es la solución. ¡Jesucristo, yo confío en Ti!
Mi relación amorosa cada día es mejor, ambos sentimos más amor y fuerza para seguir adelante llenos de alegría, entusiasmo y fe en la vida. Dios manifiesta otra de sus bendiciones y milagros en lo que siento por mi pareja y en lo que ella siente por mí.
Gracias a la bendición de Dios, ¡soy solución para la vida de miles de personas que se acerquen a mí y me escuchen! Tengo el divino privilegio de ser Su mensajero.
Querida lectora, querido lector, ¡vuélvelo a leer lleno de una deliberada sensación de certeza! Lo que digas, sucederá.
El poder creador de las palabras es enorme. Creas en esto… o no. Con todo respeto, lo que tú creas al respecto, es independiente a la gran magnitud de su poder. Tan así, que, de hecho, si dices no creer en el poder de un decreto, entonces para ti no funcionará y así se cumple ese poder en ti.
Las palabras pueden crear realidades, pueden motivar, inspirar, educar e incluso curar. Modestia aparte, de todo lo anterior, vivo parado en la evidencia desde hace muchos, muchos años. Mi trabajo como consejero es el máximo grado de verdad que sustenta lo que afirmo.
Bajo esta misma dinámica, el enorme poder de las palabras, pueden también destruir, humillar y herir. Las palabras son la herramienta más poderosa que posee un ser humano. ¡Evita a toda costa hablar mal de tu futuro o de ti mismo! Aunque parezca increíble, hay gente que lo hace. Tú no lo hagas.
En el ámbito creativo, las palabras son capaces de construir mundos enteros y personajes con vida propia en la mente del lector o del oyente. Un escritor utiliza las palabras para dar forma a sus ideas, para plasmar en papel sus pensamientos y emociones, y de ahí, puede explotar de manera impresionante para hacer realidad lo que al principio fueron “solo palabras”. Basta que te detengas a pensar en forma estupefacta en lo que pasó cuando a alguien se le ocurrieron estas dos únicas palabras y todo lo que sucedió después: “Harry Potter”.
Un poeta usa palabras para expresar su visión del mundo, su amor, su dolor. ¡Y logra hacer que otros humanos lo experimenten!
Un cantautor emplea palabras para transmitir un mensaje a través de su música. ¡Y logra que miles sientan y revivan lo que sus palabras expresan incluso al paso del tiempo!
El poder de las palabras es enorme. ¡Profetiza bienestar para tu vida!
En el ámbito personal y emocional, las palabras pueden tener un impacto profundo en nuestras relaciones y en cómo nos sentimos acerca de nosotros mismos. Una palabra amable puede levantar el ánimo de una persona que está teniendo un mal día. Un cumplido sincero puede mejorar la autoestima de alguien que está luchando con su autoimagen. De todo esto, vivo de la evidencia. El trabajo que Dios me puso a hacer en esta vida es el máximo grado de verdad desde el cual te hablo y te afirmo lo de hoy.
Las palabras que uses para describir tu futuro inmediato tienen un poder enorme.
Las palabras tienen el poder de influir en nuestras decisiones y acciones. Una historia convincente o un argumento bien articulado puede cambiar nuestras opiniones y formas de pensar. ¿¡Qué historias te cuentas a ti mismo!? Porque si crees que solo alguien como Stephen King tiene el talento para inventar historias de terror, es porque quizá él no ha escuchado las que tú te cuentas a ti mismo. Quizá lo asustarías.
Yo declaro para tu vida y la mía:
¡Vas a estar bien! ¡Todo va a mejorar! Este mes de septiembre será el mejor mes de septiembre de todos los que hemos vivido en nuestra vida, dado que atestiguaremos milagros que ya han empezado a suceder desde otra dimensión y no tardan en materializarse en esta. ¡Contamos con El Favor de Dios y Su mano será evidente en unos momentos más! ¡La paz, la alegría, la salud, la prosperidad, la ayuda mutua, la seguridad, la creatividad y el buen ánimo serán la norma desde este momento! Ya lo debes estar sintiendo.
Nunca debemos subestimar el poder creador de las palabras. Debemos usarlas con cuidado y respeto, conscientes del impacto que pueden tener en nosotros mismos y en los demás.
Si disfrutas de las palabras que uso en mis publicaciones, te recuerdo que al suscribirte recibes la dichosa oportunidad de leer el total de temas como estos que vengo publicando en las más recientes semanas:
Siempre pido a Dios que me inspire. En cada momento previo a subir al escenario a dictar una conferencia, le pido a Dios me dicte lo que deba decir. Cada que me siento a escribir, hago lo propio. Así, que mis palabras te acompañen y sean la ayuda que vienes pidiendo. Tengo fe en que así sea.
¡Emoción por existir!
📕 La recomendación del libro de la semana
En este libro empecé a escribir lo que yo sentí cuando dije “Sí” a Dios. Creo es el momento de recomendártelo. Lo descargas en Amazon:
📸 La imagen de la semana
📝 La frase de la semana
“Así será mi palabra que sale de mi boca,
no volverá a mí vacía sin haber realizado lo que deseo,
y logrado el propósito para el cual la envié.”.
–Isaías 55:11.
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Cuanta bondad y compasión para mi vida diaria Dr.
Eternamente agradecida por compartir, disfruto leerlo. Dios bendice su alma, su mente, su espíritu.
Saludos Dr.
Gracias Doctor. Amén